Para Isabel Larrosa, por los momentos:
Aquella será nuestra canción amiga,
Tuya y mía,
Nuestra.
Con aquella canción nos recordaremos,
Con aquella canción te diré princesita.
Te daré y me darás el pecho y los brazos.
Solo allí estaremos siempre seguros.
Solo allí nuestras almas se sentirán seguras.
Y cada mañana,
antes de vernos la escucharemos.
Y cada mañana,
cuando vayamos a nuestro encuentro,
recitaremos la letra.
Y cada mañana,
cuando nos miremos a los ojos,
el mundo la cantará por nosotros.
Aquella será nuestra canción y nuestro secreto.
Tuyo y mío.
De los dos.
Amiga y princesita mía:
“Te seguiré hasta el final. . .”
Hasta el mismo tiempo.
Y jamás me marcharé para siempre.
Será aquella nuestra canción y nuestro pacto.
Nuestra locura.
El espacio donde nuestras almas se encontrarán
por siempre.
Hasta el final.
Donde tú y yo nos recordaremos,
Con la que nos diremos te quiero.
Con la que nos abrazaremos.
Con la que nos volveremos locos por nada.
Será nuestra canción. Nuestro pacto.
Nuestra locura. Nuestras almas.
Nuestros cuerpos.
Te seguiré hasta el final
Callado y en silencio,
Pensando en aquella canción,
Recordándote de a poco,
Sintiéndote a mi lado.
Hasta el final.
Por siempre.
Siguiéndote donde tú vayas . . . hasta el final.
Y Con las luces del alba,
Las luces de nuestras almas.
Te seguiré hasta el final
Donde nos diremos te quiero.
Donde nos abrazaremos.
Donde nos volveremos locos por nada.
Por siempre.
En el final.
En el final del mismo tiempo.
En el final de nuestro silencio,
de nuestras propias almas.
martes, 14 de agosto de 2007
Aquella será nuestra canción
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2 comentarios:
Yo tb te seguire hasta el final :( VUELVE!!! QUE SE TE EXTRAÑA UN MONTON!!!
. . . que envidia isabel larrosa
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